Fue liberarlo y se llevó un susto de muerte. El becerro de los alces, que ya se podía mover sin ataduras, atacó a un hombre que la había capturado para un proyecto de investigación. Estaba como loco por volver a su hábitat natural y se vengó.
Fue liberarlo y se llevó un susto de muerte. El becerro de los alces, que ya se podía mover sin ataduras, atacó a un hombre que la había capturado para un proyecto de investigación. Estaba como loco por volver a su hábitat natural y se vengó.