Suena a frase de padre, es verdad, pero es que no puedo decir otra cosa después de ver el vídeo que cierra este artículo.
Edu García, el niño de «Aquí no hay quien viva», se ha convertido en un rapero que cuelga sus vídeos en YouTube para triunfar. No le va nada mal con las reproducciones que acumula, pero lo cierto es que su éxito se debe al cambio de imagen que ha experimentado.
Va de malote
Aparece muy desmejorado y rodeado de lo que podríamos calificar como malas compañías. Fuma porros y en la letra de la canción habla de las drogas y los enfrentamientos con la policía. Nada que ver con aquel niño gracioso que se ganó a la audiencia. Ahora tiene 23 años y ha elegido otro camino bien distinto.