Raül Agné, técnico del Girona, equipo de la segunda división, abandonó la rueda de prensa del estadio del Huesca por no poder contestar a los periodistas catalanes en catalán. Los periodistas aragoneses se quejaron y finalmente decidió marcharse muy enfadado. ¿Pensáis que hizo bien? Desde luego que después de lo sucedido se vuelve a abrir el eterno debate de las lenguas en España.