Se suele decir eso de que «si no lo veo no lo creo«. Sin embargo, no siempre deberías confiar en tus ojos para tener la certeza de que algo es real. Gracias al vídeo que se muestra a continuación sabrás por qué.
Se suele decir eso de que «si no lo veo no lo creo«. Sin embargo, no siempre deberías confiar en tus ojos para tener la certeza de que algo es real. Gracias al vídeo que se muestra a continuación sabrás por qué.