Hay que estar muy loco para querer nadar con un cocodrilo. En cualquier momento el animal le puede atacar con toda su furia. Sin embargo, está convencido de que es su amigo, así que no le teme lo más mínimo.
Hay que estar muy loco para querer nadar con un cocodrilo. En cualquier momento el animal le puede atacar con toda su furia. Sin embargo, está convencido de que es su amigo, así que no le teme lo más mínimo.