En Estados Unidos los policías siguen haciendo de las suyas, parece que no aprenden. En Seattle sucedió algo estremecedor. Un oficial, de 39 años, detuvo a una mujer negra de 17 años por cruzar la calle indebidamente. Por ello, una amiga suya de 19 años se interpuso entre ambos y terminó recibiendo un puñetazo tremendo.