Un perro y un gato pueden ser amigos, está comprobado. Al principio deben conocerse jugando con delicadeza y sin hacerse daño.
Eso es precisamente lo que hacen los protagonistas del vídeo que se muestra a continuación. ¡Qué tiernos!
Un perro y un gato pueden ser amigos, está comprobado. Al principio deben conocerse jugando con delicadeza y sin hacerse daño.
Eso es precisamente lo que hacen los protagonistas del vídeo que se muestra a continuación. ¡Qué tiernos!